Funktion One, Rumaneo, y ojo al detalle como cruz y seña de la segunda edición de la marca curadora de experiencias artísticas y multisensoriales creada por el artista colombiano Vinccih
Polar proviene de la propiedad química polaridad, definida como «la condición de tener propiedades o potencias opuestas en diferentes partes o direcciones, como los polos de un imán o los terminales de una batería.»
En esta relación de opuestos, yings y yangs, y minimalismos que aprovechan al máximo los espacios libres que nace una marca única, cuyo concepto es el de la curación de experiencias únicas de primera línea en las que la naturaleza, la música, el arte y el confort se llevan al máximo nivel.
El segundo evento organizado por Polar reunió exponentes, artistas y trabajadores con un objetivo en común: curar una experiencia inolvidable y en la que primase la atención al detalle. Durante una experiencia en horario extendido pudimos bailar, disfrutar de una ubicación increíble, y crear lazos con la comunidad ahí reunida.
Este último es uno de los elementos primordiales de una buena fiesta de música electrónica, y aunque no es un elemento ignorado, resulta muy difícil asegurarse de que este esté presente en un evento. Esto se debe a que, para curar una vibra de este nivel, todos y cada uno de los aspectos del evento deben ser propiamente atendidos y trabajados. El ignorar, o no dar el mismo nivel de atención y esfuerzo puede, en el ojo correcto, convertir un evento en uno de mediana o baja calidad.
Polar 002: el buen Dios está los detalles
Así reza la frase atribuida al escritor francés Gustave Flaubert. Cuando un promotor lleva a cabo un evento en el que el público permanecerá en el recinto en un horario extendido, la atención a los aspectos que garantizan que la estadía sea placentera cobra mucho más valor. En este evento, la atención se notaba según transcurría nuestro recorrido del venue, una casa de campo con piscina y una muy extensa superficie. La construcción, de corte minimalista, permitía que saliera a reducir una selección de decoración enfocada a los materiales y los elementos de la naturaleza.
El montaje del evento se dispuso de manera que se crearan dos áreas para experimentar la música. Por un lado, la cabina y pista de baile, sumada a la energía del DJ. A espaldas de este, un sistema Funktion One capaz de realinear los chakras de cualquier ser viviente, colocado de forma que permitiera crear un espacio detrás del DJ en el que uno podía pararse a experimentar la música en su máxima expresión sonora. Un deleite total.
Aunado a este montaje, una brillante serie de secuencias visuales fueron desplegadas sobre los muros exteriores de la casa, y uno de los árboles del jardín. Una instalación que aprovecha lo mínimo para obtener el máximo aprovechamiento del espacio y los recursos con que se cuentan.
Durante la segunda edición de Polar, disfrutamos de algunos de los artistas con mayor estampa y elegancia de nuestra escena local, así como de un par de invitados de tierras lejanas, como lo fueron Francisco Barco, de Colombia, y Herck, directamente desde Rumanía.
Completaron el cartel algunos de los elementos más brillantes de la escena actual, como Eric Moreno, Vinccih, creador de la marca, y los B2D, dúo compuesto por David Hidalgo y Borja Martínez, quienes actuaron por separado, permitiendo al público disfrutar de la faceta individual de cada DJ, siendo Borja un fuerte candidato a nuestra sesión favorita de la noche: una mezcla de sonidos poco conocidos con ritmos que rompieron el hielo sobre la pista durante las primeras horas de la madrugada.
Mucho más queda por comentar sobre una marca tan única como lo es Polar. Desde el cariño de la mayor parte de la comunidad ahí reunida, pasando por hechos tan sencillos como el de que los propios padres del creador del evento sean quienes se encargan de atenderte (con todas las atenciones y gestos posibles), Polar es una marca construida para hacerte sentir en familia y en sintonía con el entorno que te rodea desde el primer momento.
Construir algo de tal magnitud requiere un cariño, propósito y entrega que ha dejado de ser vista como redituable en la escena de hoy en día. Para Vinccih y los suyos, sin embargo, estos elementos son non negotiables, valores vitales de la marca y esencia de su proyecto.
En tan solo 2 eventos, el DJ de los ojos azules y su clan han ganado un lugar que será muy difícil perder en el corazón de la frecuencia sonora alicantina. Esto, es Polar.
