La fiesta colaborativa nacida de la unión entre las marcas OMEN y Matadero celebra un debut de ensueño con Kobosil a la cabeza

La primera actuación de uno de los artistas más importantes dentro de la escena actual de hard dance marcó una noche que será difícil de olvidar para la escena Alicantina. De la mano de un cartel que reunió a lo mejor del panorama de la zona, Marmarela deleitó a la ciudad con una probada de lo que está por venir este verano.

La gran importancia de Nexo radica en que, además de traer el sonido más escuchado del momento dentro de la música electrónica a la zona más popular en cuanto a entretenimiento se refiere, pone el trabajo de dos de las marcas más potentes de la zona bajo un mismo objetivo.

Sobre los encargados de musicalizar la noche, no tenemos más que opiniones positivas. Desde las primeras sesiones, a cargo de Tere Ling y D-Bunk quedo en claro que tanto el público como la atmosfera acompañaban positivamente el desarrollo del evento.

La primera sesión que disfrutamos a fondo fue la de Kali Tek. La DJ local se ha convertido en una de las favoritas dentro del circuito underground local. Su sesión fue variada, llena de subidas y bajadas a placer y un storytelling que presenta a una Kali que se encuentra en su etapa más madura y de mayor autoconocimiento. Sin lugar a dudas, una de las mejores sesiones de la noche.

La siguiente sesión en el menú de esa noche fue la del cabeza de cartel. Kobosil dio al público alicantino una sesión mucho más groovera y bouncera que la última que le escuchamos (Spook, 2024). Sin lugar a dudas, la sesión más gozada por el público y una que nos permitió analizar el sonido actual del DJ alemán, así como la posible dirección en que la escena se dirige.

Por último, llego el momento del cierre. Con la sala todavía a rebosar, hizo su aparición en cabina otro de los artífices de esta noche. Armero es, sin lugar a dudas, uno de los exponentes nacionales, si de hard dance se habla. Además del espectacular cierre que dio, el cual mantuvo a gran parte de la sala dentro de la pista hasta el último tema, es gracias a la unión de la marca de este (Matadero) y la fiesta local OMEN que el hard dance parece haber encontrado una nueva casa en Alicante.